1.Prevención: Medio de prevención de conflictos intrafamiliares, al mostrar a la familia la forma de construir una sana interacción Y desenvolvimiento. La intervención se da a nivel educativo, por lo que el profesional no analiza la interacción propia de una familia. Al considerar a la familia como uno de los núcleos principales para el desarrollo personal y social de cada uno de sus miembros, es necesario dar a conocer las formas más adecuadas de comunicarse e interrelacionar entres sus integrantes.
2. Asesoramiento: Esta dirigida a la convivencia y comunicación para poder solucionar posibles problemas en la dinámica familiar.
Es un nivel más complejo en el que no se puede limitar en informar, dados los obstáculos familiares y de la evolución de cada miembro, estas intervenciones van a proyectar adecuadas maneras de comunicación que permitan solucionarlos. El orientador interviene sobre la petición de una familia, por lo que tendrá que analizar en la interacción de todo el núcleo familiar, para reconsiderar pautas de comunicación.
3. Tratamiento terapéutico: Las situaciones que se abordan desde este nivel son aquellas que han alcanzado crisis profundas de tipo personal o familiar de las cuales no son capaces de salir por si mismos y necesitan de apoyo y orientación especifica para eventualidades precisas. El conocimiento de la interacción familiar que haga el profesional es fundamental, ya que tendrá que ilustrar los cambios y las posibles estrategias para conseguir romper los dinamismos que están deteniendo el sano crecimiento de todo el sistema familiar.
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